para pensar por Luis Goren

         Vivimos inmersos en la violencia; nos guste o nó esa es la realidad. Lo que no está muy  claro y no se especifica bien, es cuales son las «causas» de la violencia. Personalmente, pienso que el origen de  gran parte de la violencia que nos abruma, es «el consumismo», y está provocada por ese mismo «consumismo»  .

         Es simple: cuando se analiza un poco, y pensamos en los medios de comunicación, que están manejados por las grandes empresas multinacionales o transnacionales o como se las quiera llamar, vemos que nos inundan con violencia. No nos damos cuenta, porque al mismo tiempo que la provocan, nos llenan de propaganda sobre la lucha contra la violencia, con lo cual, se produce el efecto de intentar apagar un incendio con nafta.

         TELEVISIÓN: los Noticieros, son pura violencia; están llenos de muertos y sangre, con manifestaciones violentas, y escenas francamente repugnantes. Si Ud. ve como un padre mató a sus hijos, con toda la sangre y las carnes quemadas y etc. etc., eso le tiene que pegar. Cuando vienen las propagandas, Ud. se levanta y va a tomar «algo», todo sea para olvidarse de lo que vio. O Ud se viste y va a comprar cualquier cosa, es decir se escapa para intentar olvidar. Y Ud. consume. Pero eso no es nada; las series son en un alto porcentaje, como las películas que nos pasan, violencia y mas violencia, y gratuita, es decir por la violencia en sí, que es el objetivo.

         Ud. es un padre consciente y quiere que su hijo sea bien educado; entonces Ud. le hacer ver un debate del Parlamento. Y: «sorpresa».  Ud. se encuentra con más violencia (verbal, pero violencia).

         No hablemos de subir a un vehículo de transporte público de pasajeros; es un sálvese quien pueda. Las expresiones «por favor», «gracias», y otras tantas, pasaron a ser arcaísmos del idioma. La sonrisa ha perdido vigencia. Lo único que queda es la violencia, porque así estamos educados, nos guste o no.

         Estimo que es muy difícil cambiar esta situación, porque los que deberían hacerlo no les interesa el cambio;  este estado de cosas, les rinde suculentos beneficios. Para los dueños de las grandes empresas, las personas no valen nada, lo único que importa son los «beneficios». Y lo triste, es que cuando miramos un poco la historia, vemos que casi siempre fue así, en mayor o menor medida.

         El tema da para mucho; habría que hacer un análisis de la naturaleza humana, y explicarnos por qué somos como somos, y tratar de entender cual es la razón por la que no hacemos nada de nada para provocar el cambio, y… y… y…Podríamos llenar páginas enteras de y…, pero estimo que no es el lugar ni el momento adecuado.  Es por eso que suspendo aquí.

                            Luis Goren (Beer Sheva)